Se ha considerado una de las figuras de mayor influencia en la historia política del país durante la primera mitad del siglo XX.  Fue Presidente de la República en tres ocasiones (1910-1914, 1924-1928, 1932-1936) y el único en ocupar la presidencia de los tres poderes del Estado. Durante sus gestiones presidenciales se terminó y electrificó el Ferrocarril al Pacífico, se reconstruyó Cartago después del terremoto de 1910, se crearon el Banco de Crédito Hipotecario, el Banco Nacional de Seguros (hoy Instituto Nacional de Seguros), el Ministerio de Salud, la Dirección General de Correos y la Escuela de Agricultura; se impulsó la construcción del muelle de Puntarenas y se llevó la cañería desde Ojo de Agua hasta Puntarenas. En varias ocasiones fue ministro, diputado en varios períodos por San José, Cartago y Alajuela, enviado extraordinario y ministro plenipotenciario de Costa Rica ante gobiernos extranjeros;  en una oportunidad representó en México a los gobiernos de El Salvador, Nicaragua y Costa Rica. Además, fue munícipe de San José y Cartago, escribiente en Alcaldía y Juzgado, abogado, escritor, orador, ensayista, profesor de la Escuela de Derecho, presidente del Colegio de Abogados y miembro correspondiente de la Real Academia Española. Su padre, Jesús Jiménez, y su abuelo materno, Francisco María Oreamuno, fueron presidentes de la República. Fue dueño de valiosas haciendas ganaderas en Cartago y Puntarenas;  en 1884 obtuvo el título de abogado en la Universidad de Santo Tomás; se involucró en la política desde muy joven y dio a conocer su pensamiento en distintos periódicos de la época. Colaboró en la Junta de Caridad de San José en varias oportunidades y fue declarado benemérito de la Patria en 1942.