Sobresalen en su poesía las imágenes inusitadas, así como una actitud desencantada al contemplar el mundo amenazado por el desorden y la ausencia de sentido.  Igualmente, sus poemas ofrecen una visión desencantada de la infancia y la familia. Esta visión del mundo se matiza en otros poemas, dedicados a la utopía política y los valores solidarios. Su poesía ha evolucionado desde una cálida situación de un mundo sensible y personal, a la concepción de una lírica realista, desnuda y militante.

            Realizó estudios en la Universidad de Costa Rica, siguió cursos en el área de las  letras  y filosofía. Se dedicó intensamente a la labor teatral, inicialmente en Costa Rica y después en Cuba.