Abogado, musicólogo, profesor universitario, participó activamente en 1957 en la reforma de la actual Universidad de Costa Rica, colaboró con la creación de los Estudios Generales de esa institución. Obtuvo una licenciatura en derecho de la Universidad de París. En el campo musical, realizó una labor de apreciada divulgación cultural; dirigió la Revista musical del país, en la que se transformó en 1940 el folleto que se publicaba para cada concierto, sin mucha regularidad. Fue secretario general de la Universidad de Costa Rica en 1944, decano de la Facultad de Ciencias y Letras, de 1956 a 1957, miembro de la Academia Costarricense de la Lengua, de la Academia Argentina de Letras y del Instituto de Cultura Hispánica de Madrid. Además, formó parte del Consejo Ejecutivo de la UNESCO de 1956 a 1974 y fue Embajador de Costa Rica en España en 1966 y 1967.