Historiador, diplomático, profesor, se destacó como investigador y jurista, lo que le permitió el esclarecimiento de intrincados episodios ocurridos en la historia nacional. Inició su labor docente como profesor de Historia en el Liceo de Costa Rica y catedrático de historia y economía cuando se creó la Universidad de Costa Rica. Se desempeñó como Secretario General del Banco de Costa Rica, fue colaborador destacado de la Enciclopedia Espasa, miembro de la sección de estudios americanos de la Universidad de Valladolid, de la Asociación Hispanoamericana de Historia de Madrid, y del Comité de Ciencias Históricas y Antropológicas del VII Congreso Científico Panamericano. Además, fue Embajador de Costa Rica en Chile y en  República Dominicana, miembro de la Academia Costarricense de la Lengua, de la Academia Costarricense de Geografía e Historia, Académico de la Real Academia de Historia de Madrid, España, del Instituto de Derecho Internacional "Francisco de Vitoria" y de las Academias de Historia de México, Perú, Chile, Nicaragua y República Dominicana. Recibió reconocimientos y distinciones como  el Premio Cleto González Víquez y el Premio Nacional de Cultura Magón en 1962.